¡Dios! ando metida en miles de cosas, clases, trabajo, titulación, elecciones, Transparencia, amigos, almuerzos, etc, etc, etc. Si pensaba que la época navideña era la más estresante me equivoqué maalll, estos meses han sido full adrenalínicos y mis nervios han estado en un sube y baja bárbaro.
A veces me siento una chica quinceañera que tiene todas las energías del mundo y que puede llegar a las 11 después de estudiar y darse el lujo de cantar y bailar un par de horas más. Otros días me siento más vieja que mi abuela centenaria (porque tengo una abuela centenaria que parece más a una quinceañera) en medio del limbo, dormida despierta y con dolor de cabeza, puaj! Esos días son de lo peorcito.
Y súper peor es cuando se te cruzan fechas, planes, gente, y examenes mamaaaaaa, help me! y yo que soy recontra noica, TENGO que hacerlo todo y ¡bien! ¿Ya se imaginarán cómo ando no? Están pasando cosas y buenas cosas y quisiera para un segundo para disfrutarlas.
Listo, escribí lo que mi cerebro a mil por hora me dictaba.
Chau
=)
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