Cada vez que ella lo besaba se quedaba mirándolo por unos segundos a los
ojos, aquellos ojos pardos que la deslumbraron la primera vez que los
vio.
-"¿Qué piensas"? siempre él le preguntaba
- "Nada"- ella mentía
Ella nunca fue capaz de decirle lo que quería; sumergirse en sus ojos y saber la verdad: si ella era la única.
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